En los últimos años escuchamos cada vez más hablar sobre ciberseguridad y protección de datos. Cada día se hace más hincapié en la importancia de estar alerta y contar con las medidas necesarias para proteger nuestra información online. Un router ciberseguro resulta fundamental para asegurarlo.
Este aspecto es aún más importante ahora que el teletrabajo está tan extendido. Puesto que en nuestros hogares no sólo contamos con información sensible sobre nosotros mismos, sino también tenemos de la empresa para la que trabajamos. Este aspecto implica que las empresas sean hoy más vulnerables que nunca.
La seguridad informática se encuentra en un momento de gran repercusión por el aumento de la delincuencia cibernética. Y si estás pensando que esto solo se da en las grandes empresas y que a ti no puede sucederte, piensa dos veces. El número de empresas españolas que han sufrido ciberataques han aumentado este año en un 23%.
En 2020, con el aumento en el porcentaje de trabajadores que se encuentran trabajando fuera de la oficina, la delincuencia cibernética vio una oportunidad. Y como consecuencia del uso de redes poco confiables para ingresar a los sistemas corporativos, pudieron encontrar el talón de Aquiles del teletrabajo.
El fin es claro: tener acceso a información sensible, que puedan utilizar para beneficiarse económicamente, extorsionar o incluso a veces ¡por mero aburrimiento! Considerando que el objetivo es prácticamente cualquier persona con acceso a la red. Y que, dependiendo de la gravedad, puede traerte consecuencias negativas en el trabajo, resulta esencial contar con las mejores armas para prevenirlo.
Por ello, un router ciberseguro debe formar parte de tu día a día. ¿Quieres conocer algunos routers seguros para el teletrabajo? Aquí te mostramos algunos que gracias a la tecnología TP-Link HomeCare™ protegen tus datos confidenciales y limitan el acceso de niños e invitados. HomeCare™ te brinda las herramientas que necesites para administrar completamente tu red.
La delincuencia siempre existirá y los delincuentes están expandiendo los medios de contacto con sus “víctimas”. Si bien una sola medida no erradicará el problema al cien por cien, es importante no dejarles la puerta abierta.
