Avatares, NFT´s, compra de terrenos virtuales y teletrabajo son algunos de los temas que hemos tocado en los últimos posts sobre el Metaverso. En este último queremos resaltar dos elementos que serán fundamentales para asegurar el correcto uso la realidad virtual: la legislación y la ciberseguridad.
Una de las principales preocupaciones que conlleva su creación es la protección de la identidad e información de los usuarios. Esto ya ha sucedido en numerosas ocasiones a través del secuestro o suplantación de identidad en redes sociales. Esto representa un peligro potencial ya que se pone en juego información personal valiosa (¡o laboral!) y puede dar pie a chantajes.
Además, se pretende que realicemos gran parte de nuestras actividades en esta plataforma, como ir de compras, por lo que compartiríamos identificaciones, número de tarjeta, número de billetes, etc.
En caso de que se cometa algún delito, ¿se aplicaría la ley? Sabemos que robar y amenazar son crímenes en el mundo real y tienen consecuencias, pero ¿cómo se gestionarán en la realidad virtual?
Ya que el avatar será una expresión de nosotros, de nuestra imagen, se puede interpretar que atentar contra éste sería atentar contra la persona física por lo que la ley podría aplicarse. Por ejemplo, en caso de ciberacoso, la ley regula el acoso a través de cualquier medio de comunicación, por lo que sería visto como un delito.
La historia cambia cuando se trata de agresiones “físicas”, ya que se entiende que existe una diferencia entre el mundo digital y el físico. Sin embargo, esto podría cambiar en el futuro, en función de la evolución que puedan tener las capacidades de los avatares.
¿Qué debe seguir la plataforma para reforzar la ciberseguridad?
El blockchain será una de las principales tecnologías dentro del Metaverso y los bloques almacenarán las identidades, lo que ya da cierta certeza porque es la tecnología más segura para ello.
Meta debe cumplir con las exigencias europeas en materia de protección de datos, en ese sentido el Reglamento Europeo de Protección de Datos (RGPD) jugará un papel fundamental. Sin embargo, también se deben crear y adaptar nuevas regulaciones ante los escenarios de crímenes futuros que surgirán.
Los expertos en ciberseguridad serán una de las profesiones más requeridas en este nuevo mundo virtual y será una de las profesiones con mayor crecimiento en los próximos años.
Indudablemente, la creación de mundos virtuales trae consigo muchas ventajas, pero también peligros. Es muy importante mantenernos informados y actualizados para evitar exponernos a situaciones maliciosas y reforzar la ciberseguridad. Sin embargo, también es responsabilidad de las empresas brindarnos las herramientas para actuar rápidamente ante una posible situación desagradable.
