En los últimos años, las redes sociales han pasado a formar parte de nuestra vida de una manera casi imperceptible. Han pasado a ser algo cotidiano, ya que nos reunimos gracias a Whatsapp y rara es la interacción social que no se comparta en Instagram. Según un estudio realizado por IAB Spain, el 87% de los internautas españoles son usuarios de redes.
El contexto actual de restricciones de movilidad ha ayudado a incrementar el uso de redes sociales. Muchas personas que no eran usuarias, han empezado a utilizarlas para estar en contacto con sus seres queridos. Sólo durante el confinamiento, el uso de redes sociales creció un 55% a nivel global.
Debido al incremento del uso del smartphone durante la pandemia, en la actualidad existe una creciente preocupación por el uso indebido de las redes sociales. Los niños y jóvenes quienes, por edad, son más influenciables, son los que más preocupan ya que tienen las redes sociales como forma, casi exclusiva, de interacción social.
Todos conocemos a alguien de nuestro entorno que pasa mucho tiempo con el móvil pero ¿cuáles son las señales que muestran una adicción a las redes sociales?
Debemos estar atentos a las siguientes pautas:
- Tiempo de uso de las aplicaciones. El usuario no sólo pierde la noción del tiempo mientras usa las redes, sino que miente sobre el período que permanece conectado.
- Necesidad de usarlas en todo momento. Tener que compartir cada instante del día también puede ser un motivo de alarma, al igual que la obsesión por observar otros perfiles de manera constante.
- Uso de las redes para olvidarse de los problemas. Usar la red social como escape mostrando una vida demasiado idílica e irreal donde no existen los problemas.
- Ansiedad por falta de uso. La persona en cuestión parece nerviosa por no poder utilizarlas, hasta el punto de estar irritable por este motivo.
- Privación de otras actividades. El cambio de hábitos, tanto de sueño como de hobbies, en detrimento del uso de las redes también puede suponer una señal de alarma.
El uso indebido de dichas aplicaciones puede generar en los usuarios trastornos psicológicos como ansiedad o depresión por no cumplir las expectativas que se muestran en las redes.
No obstante, realizar un uso responsable de ellas es algo positivo que nos permiten estar informados de cuestiones que de otra forma no podríamos. Las redes sociales nos acercan a los que están lejos pero no debemos permitir que nos alejen de los que están cerca, ni de nosotros mismos.
Muy buen post. Gracias por compartirlo.